Se gradúa a los 67 años en centro penitenciario

“Tener mi bachillerato es un gran logro y aunque sea un anciano quiero echar para adelante”, dijo Manuel Salvador González Arias, de 67 años de edad, quien fue uno de los seis bachilleres que se graduó con honores, el pasado sábado en el Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Salamina (Caldas).

“Esto es lo mejor que me ha pasado en la vida. A pesar de las circunstancias he tenido una nueva oportunidad, lo que no pude hacer antes afuera, lo conseguí aquí”, dijo Roger González Castañeda, otro de los graduados de 30 años, quien después de la ceremonia y aun con el diploma en sus manos, abrazaba gozoso a sus dos hijos y a su esposa, que fueron a acompañarlo y a disfrutar. Y para completar su alegría, recibió de manos de la rectora de la Institución Educativa Sara Ospina, Blanca Nelly Loaiza Arias, el premio a La Excelencia. El que según él, alcanzó después de mucho sufrimiento y dedicación. “Cuando salga de aquí, pienso seguir adelante y ponerme otras metas a seguir”, concluyó.

El centro

Según el director del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Salamina (Caldas),  Raúl Fernando Rodríguez Cardoso, la actual es la cuarta promoción de bachilleres del centro carcelario. “En el momento tenemos una oferta académica con 110 estudiantes. Desde lo penitenciario ayudamos a construir un nuevo modelo social, fortalecido en la educación para el trabajo”, dijo. Allí se cuenta con formación académica para los internos en los niveles básica, media de secundaria, virtual a nivel de formación complementaria, cuatro tecnologías con el SENA y convenio con dos universidades.

“Los docentes vienen varios días a la semana. También tenemos un grupo de instructores que son internos, con un nivel académico más alto, que siguen carrera profesional o tecnológica y que sirven de monitores en los demás días de la semana”, precisó Rodríguez Cardoso. Solicita al sector productivo que “abran las puertas a estas personas que salen con competencias laborales de los establecimientos penitenciarios, para así disminuir la reincidencia en el delito”.

Oportunidades

Don Manuel Salvador es un campesino a quien siempre le ha gustado el estudio. Tiene  varios cursos con el SENA y otros con el Comité de Cafeteros. Pretende más adelante, ahora después de haber terminado su bachillerato, buscar nuevas oportunidades de estudio y trabajo. Agradece al INPEC, al Sara Ospina, al director del centro penitenciario, a la rectora y en especial a las profesoras por su apoyo ymaravillosa labor educativa. Y aconseja: “a quienes aún no estudian, que se capaciten y cambien de mentalidad”.