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Gobierno
empezó a apagar fuegos en bomberos de Caldas
Jueves,
Mayo 14, 2015
MARTHA
LUCÍA GÓMEZ Y LUIS FERNANDO RODRÍGUEZ
LA PATRIA
| MANIZALES Y SALAMINA
“Estamos
más tranquilos y protegidos con la adquisición de
estos equipos, se atienden con seguridad incendios estructurales”, dijo el
comandante de Bomberos Salamina, Fabio Oswaldo Tabares Gómez.
Este
Cuerpo fue uno de los 10 que en Caldas salieron beneficiados por el programa Fortalecimiento
de los Bomberos de Colombia, en los que el Gobierno Nacional invirtió $825
millones.
La entrega fue el pasado sábado en la Estación de
Puente Aranda (Bogotá), ante el presidente Juan Manuel Santos y el ministro del
Interior, Juan Fernando Cristo. Para Caldas, la gestión fue de alcaldes y del
capitán Óscar Fernando Mejía, comandante de Bomberos de Riosucio y delegado de
los Bomberos de Caldas en la Junta Nacional de ese sector.
Con
proyectos
El
programa de Fortalecimiento es de la Dirección Nacional de Bomberos de Colombia
(DNBC), dependencia del Mininterior que surgió en el 2012 con la Ley 1575 o
nueva Ley de Bomberos, y que derogó la 322, que no ayudaba a estos organismos
de socorro, afirmó el subteniente Albert Garay, de la DNBC.
La actual ley unificó a los bomberos voluntarios
con los aeronaúticos y los oficiales; creó la Junta Nacional de Bomberos que
les abrió asiento a delegados departamentales y estableció un comité técnico
para evaluar prioridades de los Cuerpos y ordenar el gasto.
La DNBC
da asesoría jurídica y técnica. El programa prioriza a municipios entre 20 mil
y 50 mil habitantes o los que estén en riesgo de sismicidad o de incendios
forestales, agregó Garay.
El aporte
fue de $14 mil 344 millones para 147 municipios de los 32 departamentos, pero
para siguientes entregas, los comandantes de bomberos y los alcaldes deberán
presentar proyectos de cofinanciación, aclaró Garay.
No
obstante, Tabares Gómez dijo que en Salamina, por ejemplo, siguen requiriendo
equipos de protección personal para otras nueve unidades; manilas para
descenso, pitones, camillas, una motosierra y guadañas.
La meta
en Caldas es que las gestiones continúen para que la población no sufra con las
inclemencias de los incendios, como ocurrió en marzo de este año en Belalcázar,
donde murió una mujer, ardieron dos viviendas y seis negocios, porque los
bomberos voluntarios de esa localidad no tenían con qué apagar el fuego.
Voluntades
Óscar
Fernando Mejía, comandante de Bomberos de Riosucio y delegado departamental por
Caldas ante la Junta Nacional de Bomberos, afirmó que se pueden adquirir ayudas
desde que haya voluntad política de los gobernantes.
Citó los
esfuerzos de los alcaldes de La Dorada, Aguadas, La Merced, Pácora, Palestina,
Riosucio, Supía y Marmato para adquirir por cofinanciación vehículos de
desplazamiento rápido; además de la voluntad de la Gobernación para asignar los
recursos del Fondo Departamental de Bomberos, creado desde el 2013. Este año
son $300 millones para 32 cuerpos de bomberos, que aunque resulta siendo poco,
les ayuda en la labor.
Dijo que
el Fondo abrió una licitación para comprar motos a las que se les pueden
acondicionar una motobomba pequeña y un kit de incendios forestales para
acceder a zonas rurales o de alto riesgo. En dos meses se ejecutaría el
recurso. A varios cuerpos de bomberos les entregarán motobombas, y repararán
vehículos en Pensilvania, Belalcázar y Samaná, proceso en cotización.
“Va
mejorando la situación. Dotar un cuerpo de bomberos es costoso, pero si hay
cofinanciación se alcanzaría en cinco años máximo. Mientras tanto, hay que
decirles a los comandantes y a los alcaldes que hay que ser gestores y buenos
administradores de las estaciones”.
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