Foto | Argemiro Idárraga | LA PATRIA
El sacerdote caldense Luis Horacio Gómez, obispo en Puerto Gaitán (Meta). En la foto,
el nuncio apostólico en Colombia, Ettore Balestrero (a la derecha), lo felicita.
Un grupo de 140 feligreses y 24 sacerdotes oriundos de Puerto Gaitán
(Meta) se congregaron ayer en la Catedral Basílica de Manizales para
acompañar a su nuevo obispo, el salamineño Luis Horacio Gómez González,
en la ordenación episcopal.
Los ordenantes fueron el nuncio apostólico en Colombia, Ettore
Balestrero; el arzobispo de Manizales, monseñor Gonzalo Restrepo
Restrepo y el obispo de Líbano-Honda, el manizaleño José Miguel Gómez
Rodríguez.
Dentro de las virtudes que debe tener un obispo, el nuncio
apostólico manifestó que se necesita una vida ejemplar, que sea buen
pastor y con
capacidad
para gobernar. Entre tanto, el arzobispo de Manizales se mostró
entusiasmado por elegir a alguien de la región para ser obispo, “porque
realmente es una gracia, además de reconocerle sus cualidades cristianas
y sacerdotales”.
LA PATRIA habló con el nuevo vicario de Puerto Gaitán (Meta)
sobre las expectativas que tiene y la experiencia que le ha representado
su vida sacerdotal en Manizales. Él se posesiona en un
mes en Puerto Gaitán.
¿Qué significa para usted este nombramiento?
La experiencia de la fe me lleva a entender que es una misión, no son
logros humanos, sino un llamado de Dios y una respuesta que doy a la
invitación que él me hizo.
¿Cómo espera trabajar en pro de la paz en esa región que ha sido golpeada por la violencia?
La violencia es la ausencia de Dios en el corazón. Mi misión, entonces, es evangelizar. Ese será mi aporte para buscar la paz.
¿Qué es lo que considera más llamativo de su vocación?
Que el Señor lo va
llamando
a uno de manera misteriosa, aunque todo bautizado está llamado a la
santidad y a vivir una experiencia profunda para ser discípulo de él.
¿Cuáles piensa que fueron las
cualidades por las que el papa Francisco lo eligió como vicario apostólico?
Son carismas que el Señor nos da y no tienen importancia para mí. Simplemente voy sirviendo en la medida en que él lo pida.
¿Cómo va a ser para usted dejar Manizales?
He disfrutado muchísimo con las comunidades a las que la Iglesia me ha
enviado. Solo tengo gratitud para ellas porque han acogido el mensaje y
espero que eso también ocurra con esta nueva experiencia en Puerto
Gaitán.
El nombramiento lo hizo el papa Francisco el pasado 10 de julio.
Trayectoria
El obispo Luis Horacio Gómez González, nació el 18 de octubre de 1958, en Salamina (Caldas).
Se preparó como sacerdote en el seminario Mayor de Nuestra Señora del
Rosario de la Arquidiócesis de Manizales, en 1991 fue ordenado
presbítero, fue vicario parroquial de Aranzazu, párroco del templo
Nuestra Señora de Chiquinquirá en Aguadas, de Nuestra Señora de los
Dolores y de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, en Manizales.
Además, fue capellán del Sena y vicario episcopal de la Administración de la Arquidiócesis de Manizales.
Reconocimientos
A través de la resolución 0220, el Concejo Municipal de Manizales le
hizo un reconocimiento al nuevo obispo, porque desde su juventud
demostró su liderazgo en las causas sociales.
De igual manera lo hizo el Gobernador, quien mediante decreto de honores, enalteció y felicitó al religioso.
Satisfechos
Durante tres horas fieles católicos estuvieron en la Catedral para
presenciar el acontecimiento. Desde sus bancas, filmaban y tomaban fotos
con celulares, cámaras y tabletas. Contaron qué les pareció el
nombramiento.
Luz Helena Marín, barrio Los Alcázares
Me parece muy bueno porque me han hablado muy bien de él y de la gestión que ha realizado.
Mariela Posada, Neira
Es excelente, se lo merece todo por su carisma.
José Albeiro Ospina, La Pradera
Muy bonito, él es muy buen pastor. Ojalá hubieran más ordenaciones.
Mario Duque, Cuchilla del Salado
Muy bueno que se haya hecho, la labor que ha hecho es muy bonita.